Más de 85.000 personas beneficiadas por nuestro trabajo, 59 voluntarios internacionales, 579 socios y colaboradores… son algunas de las cifras que reflejan el valor de nuestras acciones en 2018. Nuestro foco está en las personas, especialmente en la infancia y la juventud, a través de nuestra apuesta por la educación como un derecho universal, con un especial enfoque en la educación para la transformación social, la formación profesional y la educación técnica.
Presentamos nuestra memoria de actividades del 2018 y seguimos trabajando con rigor e ilusión para conseguir un desarrollo sostenible, humano, social y económico que contribuya a la erradicación de la pobreza en el mundo.
Gracias a todas las personas con las que hemos tenido la oportunidad de compartir 2018.
Gracias a los voluntarios y a las voluntarias que cada día se comprometen con esta misión para ayudar más y mejor.
Gracias a los jóvenes, niños y niñas que nos han permitido entrar en sus vidas para intentar brindarles con nuestro trabajo mayores oportunidades a través de la formación y de la educación.
Gracias a todos los organismos financiadores, donantes y colaboradores por la confianza que habéis depositado en nosotros y por vuestro apoyo en la construcción de un mundo más justo. Gracias también a la Familia Salesiana por vuestro apoyo incondicional.
Seguiremos haciendo nuestro trabajo lo mejor posible, pues estamos convencidos de que “Educar hoy es ayudar para siempre”.