«Los Discípulos» triunfan en la 7ª edición de Territorio Bosco

El grupo de música “Los Discípulos” se llevó el primer premio de la séptima edición del Festival Territorio Bosco, en el marco de una agradable jornada de buena música y solidaridad, celebrada en la Plaza Mayor de León. La fuerza de los temas, la calidad en la interpretación y la potente puesta en escena del grupo ganador le valieron, no sólo la alta calificación por parte del jurado (compuesto por profesionales de la música y de los medios de comunicación) sino que logró además el aplauso y el reconocimiento del público asistente.

El segundo premio se lo llevó Sueño Flamenko Bohemio, una joven formación artístico-musical de la localidad de Villamuriel (Palencia) que se ganó a la gente con su frescura, su calidad en la interpretación, lo incisivo de alguna de sus letras y su tremenda juventud, con la que se abren unas interesantes perspectivas de futuro en el mundo de la música.

En tercer lugar se situaron Morfina Kids y Sinlamento, que derrocharon calidad, fuerza en el directo, conectando con el público de la Plaza Mayor.

Estos cuatro grupos se convirtieron en protagonistas de esta Gran Final, después de una concurrida fase de selección que contó con la participación de 12 conjuntos musicales y que se inició ya en el mes de febrero.

El primer premio consiste en la contratación por parte del Ayuntamiento para hacer de telonero en uno de los conciertos principales de las fiestas de San Juan y San Pedro de León 2014, 300 € en material musical y la grabación de una maqueta con 2 temas en Music Center. El segundo clasificado tendrá un contrato para actuar en las fiestas de León 2014, 200 € en material musical y la grabación de una maqueta con 1 tema en los estudios de Music Center. Y los terceros clasificados se llevaron cada uno 200 € en material musical y la grabación de una maqueta con 1 tema en Music Center.

Mientras el jurado se reunía para deliberar, el grupo Karbon 14 puso el colofón final a la 7ª edición del Festival Territorio Bosco con un enorme derroche de fuerza, haciendo vibrar al numeroso público que se reunió en la Plaza Mayor.

Pero no sólo hubo buena música en la plaza principal de nuestra ciudad: la solidaridad estuvo presente a través de numerosas iniciativas:

 

  • Un mercado de Comercio Justo y Solidario, con la participación de 5 entidades de León, por el que pasó un gran número de personas desde su apertura a las 11.00 del mediodía;
  • De 10.30 a 13.30 h. pasaron más de 100 chicos y chicas de varios colegios, con los que se realizaron varias actividades lúdicas y talleres de sensibilización sobre las desigualdades del mundo en el que vivimos, sus causas y nuestro papel a la hora de buscar soluciones.
  • Se ofrecieron “pulseras por Bolivia”, que se confeccionaron para la ocasión por parte de voluntarios y voluntarias; había la posibilidad de hacerse una chapa personalizada, bajo el título “una sonrisa por Bolivia”. Los fondos recogidos con estas iniciativas irán destinados a un proyecto de promoción rural en Bolivia.

Una tradición que se va consolidando son las sopas de ajo que se prepararon para la ocasión y que le dieron un rico tono picante a la noche del Festival.

Hubo dos toques de color significativos: por una parte la actuación de baile hip-hop por un grupo de chicos y chicas del proyecto “espacio mestizo”. Y la coreografía entusiasta y llena de energía de las alumnas y alumnos del Colegio Don Bosco – salesianos, que bailaron la conocida canción “Happy”. A través de una vibrante coreografía fueron capaces de movilizar a los asistentes, subrayando el que todos y todas tenemos que vivir nuestros sueños y ser felices.

Toda esta fiesta de la música y la solidaridad ha sido posible gracias a muchos voluntarios y voluntarias del Colegio Don Bosco – salesianos, de la ONGD Jóvenes y Desarrollo, de la Asociación Juvenil Don Bosco y de la Escuela de Música que lleva el mismo nombre, así como a la implicación del Ayuntamiento en la organización y otras entidades colaboradoras.

Esperemos que con la ilusión y el trabajo altruista de los voluntarios de las entidades organizadoras, y con el apoyo económico y estructural de administraciones públicas y entidades privadas se logre continuar con esta iniciativa: más y mejor.